domingo, 8 de abril de 2007

ODA
(Adaptación de la historia publicada en Leyenda#2; los capitulos anterior estan en entradas anteriores)
CAPITULO 2
AZUL

El espía esmeralda triunfo, al llegar a un campamento rival, encontró el plan de batalla de sus enemigos, aunque tuvo que derrotar a dos de ellos para ocultar su huida, este guerrero a quien encarnaba Oda, comprende que es luchar por un ideal, voló en su ave hasta llegar a los suyos quienes se prepararon.

Los bárbaros llegaron con la noche, mientras se alistaban a sorprender a sus victimas fueron sorprendidos por estas, atacando con la fuerza de las serpientes de plata, la batalla fue grande; salvarían al pueblo, pero mas allá de esto, aquel espía guerrero Oda, notó una sombra, de alguien semejante a el, aunque con ropas oscuras, con ropas oscuras, parecía que una capa lo cubría y desapareció en un gran fuego verde.

En el mundo habitual, Oda en su forma de Oda Plata descansa, Odell llego junto a un personaje vestido de negro, una gabardina que asemejaba una capa, un sombrero en su espalda y los ojos verdes, el cabello largo, era similar a Oda: el Oda Verde. Odell habló:
-Entendiste el reto y la determinación, seguir una meta y un ideal, y conseguir la fuerza necesaria para hacerlo-
Oda Verde y Oda Plata se dieron la mano.

Ahora nos encontrábamos en un mundo oscuro, hay grandes edificios y varios helicópteros merodean el lugar, se escuchaban algunos disparos, se veían algunas personas correr por el lugar, cruzando una esquina Oda Verde se esconde:
-Odell, ¿Estas conmigo?- Pregunta
-Siempre-
-La información que adquirí como Oda Plata, dice que este mundo ha sido vendido a extraterrestres, la gente será esclavizada si es atrapada, ¡Somos cazados!-
Un llanto se escuchaba, Oda reviso a su alrededor y alcanzo a ver una pequeña niña, corrió hacia ella y la cargó, mientras una luz pasaba tras ellos, Oda corrió y fue llamado, se dirigió hacia allá, donde había un grupo de personas que lo esperaba en una casa, allí se encerraron en una casa y la madre de la niña saludó:
-Gracias Azul-
-No, yo…- Responde Oda
Un hombre lo guía hacia un sótano
-Se ve diferente- Le dice este
allí siguieron un largo túnel, al llegar al otro lado vieron un refugio, gente en camillas, niños acostados en los rincones, también civiles armados, los cuales al cabo de unos segundos se lanzaron contra Oda, esposándolo sin que este opusiera resistencia, después de lo cual se lo llevaron
-Verde- Dijo la voz de Odell, al que solo escuchaba el Oda Verde
-No te preocupes Odell, es obvio que hay otro similar a mí-

Llegaron a un cuarto con varias computadoras y algunos vehículos:
-¡Comandante!- Gritó un guardia
-Ya era hora- Dijo la voz de alguien que venia acercándose- déjenlo, yo me encargo-
Se fueron todos y se presentó este personaje con ropas iguales a las de Oda Verde, pero azules y sin el sombrero que este llevaba en la espalda, además de cabello recogido dejando ver el mismo rostro, Verde comenzó la presentación:
-El Oda Azul, me imagino-
-Y tu el Verde- Decía mientras lo desataba – Sabia que alguno vendría por mi, pero no me iré, no podemos decidir que el mundo de esos humanos sea real, para mi la realidad es el sufrimiento de estas personas-
-Eres su líder, pero no es tu sitio, somos uno, tu los sueños y yo las metas-
-Ahora mi sueño es liberarlos, fin de la discusión, soy el único que puede hacerlo-

En los días siguientes, Verde ayudaba a las personas, mientras Azul, un egocéntrico, pero a la vez gentil líder, creaba un último plan, usarían un arma alienígena, para destruir el portal por donde llegarían los extraterrestres; este portal se veía en el cielo, era la forma de transportarse desde otro punto del universo, en pocos días aparecerían los invasores.

Debían alcanzar un láser gigante que estaba en las afueras de la ciudad, en un peligroso campo abierto, el Oda Azul explicaba:
-Si no alcanzamos a destruirlo antes de que lleguen tendremos que enfrentarnos a algunas naves-

Varios vehículos salieron a toda velocidad, Oda Azul los dirigía, la salida de la ciudad estaba llena de helicópteros, Azul pensaba:
-Malditos, vendieron a su propio pueblo-
Luego un hombre le hablo:
-están aquí-
-Tal vez no vuelvan a ver a sus familias- Les decía Azul – pero asegúrense de que ellas vean otro día-

Los vehículos iban rápidamente, las armas de este ejército eran poderosas y atacaban a los helicópteros y naves alienígenas que llegaban por el portal en el cielo. Mas adelante, en las afueras de la ciudad se veía un telescopio gigante, Azul dijo:
-No es solo un telescopio, es la mira de una gran arma-
Azul bajó de su vehículo,
-Comandante no puede ir solo-
-Tal vez sea un ser mas completo de lo que creen- agregó Oda que estaba en un vehículo cercano
-¡Cúbranme!- grito Oda Azul

Ambos odas corrían hacia la gran arma, había algunas explosiones, Oda Azul dijo al Verde:
-Un ser completo, no es un mal sueño-
-Una gran meta- respondió el Verde
Mientras corrían se unieron como uno y tras un brillo plateado se vio solo al joven Oda, el ser humano, una combinación de los otros el Verde, el Azul y el Plata, el comenzaba a crear un balance; corrió hasta llegar al arma, que sabia como activar, lanzando un rayo al cielo, estallando el portal y con el gran parte de las naves. Oda vio como la esperanza volvía a los hombres:
-Ya es hora de seguir-.
ODA
(Adaptación de la historia publicada en Leyenda#1; el capitulo anterior esta en una entrada anterior)
CAPITULO 1
EL RETO

Soy Odell, guardián y protector de aquellos seres llamados Odas, y me encuentro con el ultimo de esta especie, quien ha dejado escapar sus diferentes personalidades y ahora es solo un ente vació, un cuerpo sin conciencia aparente, que se mueve por inercia; los humanos no pueden verme, el si pero parece que no siente a nadie, ha entrado en su casa y va su habitación, un reflejo de su cabeza, un espacio sin fin, un vació infinito. Desde el fondo una figura viene hacia nosotros, resplandece plateado, su ropa es muy parecida a la de Oda, igual su rostro…, el Oda Plata ha venido, en su muñeca izquierda tiene un reloj bastante tecnológico, corre hacia Oda hasta que chocan, ahora solo veo a Plata, la habitación cambia a un orden casi total, me ve y me habla:

-Odell, he tomado posesión de Oda, al salir de su mente sabia que debía volver, soy la razón, una razón que no sirve de nada sin objetivos-
-Es lo mejor- Responde Odell –Un sentimiento dominando sin ser racional, seria intratable-

Plata mira su reloj y de ahí se extiende una proyección, un universo, mas de uno, la mente de cada ser existente que tiene miles de universos en ella, lo que se ve es un mapa, un camino a todos esos mundos y un rastro de los Odas, Plata comenzará de una vez, desaparece del universo conocido y yo lo sigo…

Amanece, es un mundo creado por cualquier joven, posiblemente el mismo Oda que duerme en una habitación de una pirámide antigua en América (Muy seguramente). Puedo ver salir el sol tras una montaña, los tonos calidos del cielo de la mañana hacen que los humanos tengan esperanza, pronto los rayos de sol entran por la ventana y Oda comienza a despertar, aquellos rayos secan los campos de maíz, húmedos por la lluvia de la noche anterior, el preludio de una tormenta, un guerrero viene en una serpiente alada, volando casi sobre la tierra, mientras rompe el viento, las puertas de una pirámide principal se abren para dejar entrar aquel portador de malas noticias.

Oda en este mundo es un caballero, al servicio de un reino y como tal debe alistarse ante sus compañeros, fuertes guerreros indígenas, es bueno que alguien piense en ellos como algo más que delgaduchos engañados con espejos, han de presentarse a escuchar al viajero, están junto a su líder y el visitante ante ellos se pronuncia.
-… Son bárbaros, vienen por el norte, dejando destrucción a su paso, realmente no quieren conquistar, su interés es destruir; en mi aldea fueron victimas todos menos uno…, yo. Fue el ultimo atardecer que tuvimos- Continua el visitante –con la luna llegaron legiones de hombres desde todos los lugares, conocían nuestras rutas de escape, nos acorralaron y mataron, los niños corrían de un lado a otro, sus llantos eran incomparables, pues los cazaban como animales, y dejaban sus cabezas rodando por el suelo, nadie quisiera sentir lo que sintieron sus madres antes de morir y caer bañándose en su propia sangre,…, ayúdenme y ayúdense…-

El líder responde ante el y sus guerreros:
-Una vez más recordaré su misión; forjar el futuro, protegiendo el presente. Es posible vivir libre, el destino los ha elegido para que lo creen y ahora es cuando deben luchar contra aquellos que quieren destruir sus sueños, acaben con aquellos que desean pasar sobre ustedes, ellos vendrán aquí pero encontraran guerreros invencibles, los que vivirán con sus convicciones o morirán-

Un grito de batalla se escucha, el líder ha ordenado acabar con los bárbaros, antes de que aquellos acaben con el mundo conocido, pero a pesar de ser bárbaros son grandes estrategas, se deben entender sus planes y será enviado como espía uno que sabe lo que quiere, comprende su lugar en la vida y sabe a donde tiene que llegar: Oda; portando una armadura dorada con esmeraldas en su pecho, monta sobre un cóndor gigante y se va volando, escuchando aun en su cabeza su ideal: las palabras de su líder. Atraviesa el cielo buscando el lugar perfecto para descender, mientras tanto, piensa en la determinación para el futuro, entiende lo que debe hacer en su realidad, sus ojos brillan verde, tanto como aquellas esmeraldas que porta.